Tentación.

Y piensa sólo en una frase
una frase que no puede hacer palabras
porque provocarían sorpresa
y opiniones contrariadas.

Y quiere dejar de escucharla
pero no puede,
esa frase llena sus oídos.

Quiere quiere quiere...

Pero sabe que está prohibido.

No por sus propias leyes, sino por leyes ajenas
externas, más antiguas que las que rigen su vida.

Por leyes del juzgar
Por leyes del otro
Por las leyes de lo bien y lo mal visto
Por las leyes de lo que debería y no debería ser

Pero por una ley más superior todavía,
por la ley que domina a la otra persona, a quien desea.

Ganas de ir, enfrentar, decir
largar todo en un soplo
y recibir lo que tanto anhela.

Hay mucha tentación en su sangre
Hay mucha retención en su voz
Hay mucho deseo en su mirada
Hay mucho fervor en su alma

Anhelando lo prohibido
Tentación corruptora

Soporta en sus oídos la voz del Deseo...
...que llama,
...que tienta,
...que dice,
"Andá"
"Hacé"
"Decí"


En la oscuridad la persona calla.
En la oscuridad de la noche la persona sueña.
En la oscuridad la persona cumple sus deseos, intentando no ser descubierta.
En la oscuridad de la noche es tarde para prohibidos
y es momento de la tentación.