24.5.21

Un cuadro

Luz o no luz. Binario.

Lo que percibimos, lo que imaginamos. Lo que vemos, lo que desconocemos.

Vos me maltratás, pero es adentro, es a oscuras, es lo que nadie alcanza a vislumbrar. Quizás alguien astuto lo sospeche, alguien que preste real atención cuando nos mira. Alguien que se detenga en lo que transmiten mis ojos, el trazo de mi sonrisa, la forma en la que hablo, los colores de mis prendas, la manera en la que me muevo en el espacio que compartimos.

Yo soy la luz de tus ojos, eso dirán en todas las reuniones sociales. Las chicas comentarán lo afectuoso que sos conmigo, los amigos remarcarán lo bien que nos vemos juntos; ambos coincidirán en la suerte que tengo de que estés a mi lado. Te esmerás pintando este cuadro en detalle. Tanto te esmerás que nadie se pregunta de qué está hecha la pintura, qué tan tenso está el lienzo que alberga tu arte, cuál es la madera del bastidor que sostiene lo que estás haciendo.

Cuando la proyección pasa por realidad, la sombra le gana a lo sólido.